Para esta caficultora brasileña con más de 15 años liderando la producción de sus fincas familiares certificadas Rainforest Alliance, cada proceso importa para producir los granos de una bebida que considera sagrada.
Hoy es claro que no hay espacio para la exclusión de las mujeres en las cadenas de valor y de la participación en la toma de decisiones que definen el futuro de esta y futuras generaciones. Así lo resalta Carmem Lúcia Chaves de Brito, mejor conocida como Ucha. Ella forma parte de la tercera generación al frente de las fincas Caxambu y Aracaçu, ubicadas en el sur de Minas Gerais, entre las sinuosas montañas que pintan los paisajes de la ciudad de Três Pontas en Brasil.
Estas fincas fueron las primeras en ser auditadas y en comercializar café bajo el Programa de Certificación de Rainforest Alliance 2020. En este, damos un paso más allá para promover la igualdad de género. Damos a las plantaciones y a las compañías, nuevas herramientas para comprender las brechas de género desde su raíz y abordar las posibles soluciones.
Brasil el mayor productor y abastecedor de café en el mundo. Tan solo en la cosecha del 2020/2021, exportó un volumen récord, con la venta de 45,6 millones de sacos (de 60 kilos) según el Consejo de Exportadores de Brasil. En las 375 hectáreas que abarcan sus fincas, Ucha promueve prácticas más sostenibles para producir lo que ella llama un café virtuoso. Pero ¿qué significa un café virtuoso?
La mejora continua de la caficultora brasileña
La sostenibilidad es un camino que no termina cuando se otorga la certificación a una finca. Nuestro nuevo Estándar de Agricultura Sostenible ayuda a empoderar a los agricultores para que adopten un modelo de mejora continua. Además de los criterios tradicionales de aprobar/reprobar de la certificación, los agricultores también pueden establecer los objetivos más provechosos para su contexto particular. Estas prácticas van de la mano con la visión de Ucha. Ella tuvo claro cuando llegó a liderar la producción de las fincas hace más de 15 años, que la extraña era ella, pues sobrepasaban lo tradicional. Fue con ese entendimiento que su visión e innovaciones se gestionaron formando una relación participativa, respetuosa y de mejora continua con las personas que trabajan en la finca.
El sueño de la caficultura brasileña fue iniciar una transformación para que en la fincas se hiciera una caficultura comprometida con el medio ambiente y con las personas, revalorizando el trabajo del campo. Los indicadores inteligentes de la certificación le han ayudado a identificar las medidas más efectivas a adoptar para lograr una producción aún más sostenible.
Los datos recopilados a partir de estos indicadores inteligentes permiten a los agricultores mostrar mejor sus esfuerzos y cuantificar los beneficios de las prácticas más sostenibles. Esto contribuye a mejorar el acceso al mercado y los precios de sus productos.
Cuidar los recursos naturales
Cuidar el medio ambiente es prioridad de Ucha y su familia. Han sembrado bosques con especies nativas y corredores ecológicos que albergan a cientos de miles de aves, animales y vegetación. Su producción de café sigue los requisitos del Estándar de Agricultura Sostenible, donde la recuperación y el mantenimiento del suelo son guías para alcanzar mejores prácticas agrícolas.
En las 211 hectáreas de la Finca Caxambu por ejemplo, dedican 120 de ellas al cultivo de café, más de 60 a recursos legales y áreas de preservación permanente (APP), 13 a pastos y un área de casi 10 hectáreas para maquinaria de beneficio de café. Etas hectáreas complementan las otras 164 hectáreas de su finca hermana, Aracaçu.
El café es particularmente vulnerable a los impactos del cambio climático. Tan solo en 2021, una ola de frío y una fuerte sequía en Brasil afectaron el suministro y los precios del grano en todo el mundo. Nuestro programa de certificación proporciona una evaluación de las vulnerabilidades climáticas locales, antes de crear un plan de acción personalizado, fortaleciendo la resiliencia de productores como Ucha y su familia.
El café y el empoderamiento de las mujeres
Con una preparación en pedagogía y psicología, además de un constante deseo de estudiar, Ucha siempre estuvo segura de la importancia y necesidad de empoderar a las mujeres en el campo.
En muchas de las fincas de café de su región, las mujeres solo participaban antes en la cosecha del café, excluyéndolas de otros procesos que representan mejores y más constantes ingresos. Esto no iba con la visón de Ucha. Fue hasta después de cuatro años de capacitaciones y diálogos que logró incentivar, capacitar e incluir a las mujeres que trabajan en sus fincas, en todos los procesos de la producción del café.
“Fueron las propias mujeres que a través de esta oportunidad, tomaron sus espacios con fuerza. Asumieron su lugar y su valor dentro de nuestra finca. Nosotras debemos tomar estos espacios porque somos competentes y lo podemos hacer. En esta finca no somos mujeres y hombres, somos personas apasioanadas por una caficultura sostenible y comprometidos con la virtuosidad de nuestro producto.”
Esto es de gran satisfacción para el equipo de Rainforest Alliance. Así lo resalta nuestra colega Claudia Medrano, Gerente Senior de Evaluación y Abordaje en Latinoamérica, Rainforest Alliance:
“Me considero dichosa de poder aportar a que el Estándar de Agricultura Sostenible sea un tema que las fincas implementen pero más aún, el poder escuchar los testimonios de trabajadoras y socias de fincas, grupos y cooperativas que cada vez más son valoradas y reconocidas en roles que antes eran liderados únicamente por hombres, eso me satisface muchísimo.”
Entender el mercado
Ucha resalta que existe hoy una desconexión entre el campo y las personas consumidoras de las zonas urbanas. Ella ve en la certificación, una forma de reducir esa brecha. Para ella la certificación ha sido un desafío y un regalo. Ha sido de mucho valor que personas externas detecten las mejoras posibles por una caficultura más sostenible; mejoras que internamente muchas veces no se pueden notar. Es también una plataforma de crecimiento y desarrollo, para cada vez ser un poco mejores.
“Para nosotros la certificación Rainforest Alliance significa responder a la demanda del mundo. Las personas de hoy demandan colocar su dinero en productos de personas verdaderas y de sistemas productivos comprometidos con el futuro de nuestro planeta.”
Hoy su finca es un éxito, con un equipo feliz y con bienestar. Esto, para la caficultora brasileña que forma parte de los más de 400, 000 productores certificados Rainforest Alliance, es el mayor logro. Para ella, detrás de un café virtuoso hay personas, historia, alegría, fuerza, unión, cooperación y solidaridad que consiguen entregar al mundo tazas deliciosas y con mucho valor.