No debe sorprender que la demanda global de cacao esté en auge, después de todo, el cacao es el ingrediente esencial de una de las golosinas más queridas del mundo: el chocolate.
Hasta el 58 por ciento de los productores de cacao de Costa de Marfil y Ghana viven en la pobreza extrema, lo que significa que ganan menos de 2,15 dólares al día. Esta pobreza aplastante puede llevar a las familias productoras de cacao a mantener a sus hijos sin estudios para que ayuden en sus fincas o a tener que trasladarse a zonas forestales protegidas en busca de tierras más fértiles.
Para combatir estos desafíos, Rainforest Alliance trabaja con casi un millón de productores de cacao —la mayor parte de ellos en África Occidental, donde se produce el 70 por ciento del cacao del mundo— para construir medios de vida prósperos y crear resiliencia climática por medio de certificación y capacitación. Nuestro programa de certificación también atiende problemas del sector (como por ejemplo el trabajo infantil y la deforestación) con enfoques reflexivos, holísticos y basados en tecnología y datos que se basan en nuestros muchos años de experiencia.
Debido a que Rainforest Alliance tiene el compromiso de mejorar continuamente nuestras intervenciones, desde 2019 hemos implementado medidas adicionales para fortalecer las auditorías y ofrecer más apoyo a los productores certificados en África Central y Occidental. Además, hemos sumado a estos esfuerzos un Fondo de Cacao para África de $5 millones de dólares que ayuda a los productores de África Central y Occidental que necesiten más asistencia para cumplir con nuestros requisitos de certificación.
Healthy forests and vibrant communities are an essential part of the global climate solution. Sign up to learn more about our growing alliance.
Derechos humanos: Un enfoque holístico para detener el trabajo infantil en las fincas de cacao
Aproximadamente 1.5 millones de niños están involucrados en trabajo infantil en la producción de cacao solo en Costa de Marfil y Ghana.
El trabajo infantil siempre ha estado prohibido en las fincas certificadas Rainforest Alliance. Pero durante el transcurso de nuestros muchos años de certificación, hemos aprendido que limitarse a prohibir el trabajo infantil no es suficiente.
Esa es la razón por la cual nuestro programa de certificación aborda ahora el tema del trabajo infantil de una forma más holística, aplicando un enfoque para evaluar y abordar. El programa requiere que las fincas e instalaciones de procesamiento certificadas establezcan comités internos para prevenir y monitorear el trabajo infantil, para remediar rápidamente cualquier caso que pueda encontrarse. (Las familias también reciben capacitación sobre cómo lograrlo). Un auditor evalúa los procesos que establecen estas fincas y observa si hay evidencias de trabajo infantil durante las auditorías.
Una cooperativa dirigida por mujeres en el sur de Costa de Marfil ilustra cuán efectivo puede ser el enfoque de y abordar, especialmente cuando se acompaña con el apoyo financiero del Fondo para el Cacao de África. Kole Minriene, presidenta de Société Coopérative Agricole Fraternité d’Adzopé (SCAFRA) explicó que estos fondos permitieron a su cooperativa poder capacitar a los miembros; comprender y mitigar los riesgos del trabajo infantil, llevar a cabo actividades de concientización en la comunidad; y hacer sondeos a las familias locales para saber si tienen hijos que deberían estar estudiando. Finalmente, el fondo ayudó a la cooperativa a comprar 3.000 gallinas como forma de aumentar los ingresos de sus familiares —dinero que ayuda a los padres a contratar ayudantes para las fincas (en vez de poner a sus hijos/hijas a trabajar)— y a pagar tarifas escolares. «El Fondo del Cacao de África nos ayudó bastante», refirió Minrienne.
También tomamos un enfoque de evaluar y abordar el trabajo forzado, la discriminación, la violencia en el trabajo y el acoso.
Proteger los bosques: Un innovador avance en la auditoría de certificación
Costa de Marfil y Ghana, países que en conjunto producen dos tercios del cacao del mundo, perdieron un 25 y un 8 por ciento, respectivamente, de sus bosques primarios entre 2002 y 2019. La producción de cacao fue un factor sustancial de esta pérdida de bosques.
Para evitar que las fincas de cacao se expandan hacia los bosques, Rainforest Alliance usa ahora mapas de Geoposicionamiento Satelital e imágenes satelitales de áreas limítrofes entre las fincas y los bosques, lo cual es una innovación en la auditoría de certificación. Anteriormente, los auditores disponían de poca información con respecto a dónde empezaban las plantaciones y dónde los bosques. Pero ahora, nuestro Programa de Certificación de 2020 exige que todas las fincas certificadas cuenten con mapas GPS; después los cotejamos con mapas de riesgo personalizados que hemos creado para identificar los puntos álgidos de deforestación en regiones productoras de cacao. Esto permite a los auditores detectar posibles intrusiones en zonas boscosas y tomar acciones oportunas si así ocurriera. También visitamos con antelación a los grupos de fincas para ayudarles a prepararse e implementar acciones correctivas de ser necesario.
Además de proteger los bosques, nuestro programa exige a los productores incrementar la cobertura boscosa en sus tierras y alrededores, en tanto que se promueven otras medidas para fomentar la biodiversidad, como por ejemplo la agrosilvicultura, que es la práctica de plantar árboles de sobra entre cultivos de cacao.
Abordar los desafíos del sector desde la raíz. Mejorar los medios de vida de los productores
El factor que más impulsa el trabajo infantil y la deforestación es la pobreza. Los productores de cacao apenas reciben un seis por ciento del precio de venta en un supermercado. Son quienes más pierden en la cadena de suministro, pues sufren la carga de unos precios que se han caracterizado por mantenerse bajos.
Adoptar los métodos de agricultura más sostenible, incluidos en nuestro programa de certificación, son formas para mejorar los ingresos de los productores. Mediante el uso de técnicas manuales y naturales de control de plagas, por ejemplo, los productores pueden evitar gastar dinero en costosos agroquímicos y, a su vez crear suelos más saludables. Un suelo mejorado genera mejor producción y así el productor reduce costos y mejora su ingreso. De hecho, tres estudios* publicados entre 2018 y 2020 concluyeron que los ingresos de fincas de cacao certificado en Ghana y Costa de Marfil fueron un 40% más altos en ingresos promedios de fincas no certificadas.
El programa también incluye requisitos para las buenas prácticas de gestión de fincas. Además, Rainforest Alliance ayuda a los productores a tener una visión más holística de los riesgos y oportunidades económicas en su ambiente. Nuestro programa ofrece, y su uso es un requisito, una herramienta funcional que digitaliza datos a nivel de finca y proporciona a los productores una forma de analizar el desempeño y tomar mejores decisiones comerciales. Una herramienta de valoración de riesgo de fincas ayuda a los grupos a crear planes de gestión con base en los riesgos, por ejemplo, los impactos climáticos. También recopila datos sobre cómo se ganan la vida los miembros, por lo que se pueden considerar formas de aumentar la rentabilidad o diversificar los flujos de ingresos.
Dado el bajo precio del mercado de cacao, el costo para convertirse en una operación sostenible resulta fuera del alcance de la mayoría de los productores y no hay razón por la cual la carga de tener que cubrir los costos de certificación deban recaer tan fuertemente sobre los productores, quienes de entrada ya viven en condiciones difíciles. Para abordar las inequidades de la cadena de suministro, los compradores de cacao que participan en nuestro programa tienen que realizar Inversiones en Sostenibilidad y pagar un Diferencial de Sostenibilidad mínimo, que es un pago en efectivo para las fincas certificadas adicional y mayor del precio del mercado.
Cultivar resiliencia al cambio climático
La sequía, las plagas y las enfermedades pueden diezmar una cosecha de cacao, y un mal año puede resultar devastador para los productores de cacao, quienes de entrada ya sufren dificultades para llegar al fin de mes.
Los métodos climáticamente inteligentes de nuestro programa de certificación ayudan a los productores a combatir las amenazas que plantea el cambio climático. Puesto que los retos climáticos difieren según la región, las fincas realizan primero una evaluación para identificar sus riesgos y vulnerabilidades climáticas específicas; después, siguen las prácticas del programa adaptadas a sus necesidades. En Indonesia, por ejemplo, los productores de cacao se debaten contra temporadas de sequía prolongadas y fenómenos meteorológicos extremos, por lo que sus métodos podrían incluir la plantación de cultivos de cobertura y plantación de árboles de sombra apropiados a nivel local para ayudar a reducir el estrés térmico y la erosión del terreno.
Otra importante estrategia climáticamente inteligente que se aborda en nuestros cursos de capacitación para agricultores es la diversificación, que ayuda a distribuir el riesgo climático. Los productores pueden diversificar sus fuentes de ingresos cultivando distintos tipos de cosechas, criando animales o cosechando miel, todo para proporcionar una protección importante contra la imprevisibilidad de la agricultura.
Un programa fortalecido para el cacao
Nos complace informar que las medidas adicionales que comenzamos a tomar en 2019 para fortalecer nuestro programa de cacao fueron un éxito a la hora de establecer sistemas más robustos para identificar y gestionar riesgos. Se llevaron a cabo auditorías dirigidas a las fincas con mayor riesgo de incumplir los requisitos de certificación y se incrementó la conciencia entre los productores en cuanto a la invasión de zonas boscosas y trabajo infantil. El Fondo para el Cacao de África continúa brindando apoyo a las fincas que busquen incrementar su sostenibilidad y cumplir sus requisitos de certificación.
Rainforest Alliance mantiene su compromiso de mejorar el bienestar de las familias y la salud de su medio ambiente en África Occidental y en todo el mundo.